Crecimiento y statu quo: desafiando lo establecido

Macarena Letelier

El Índice Mensual de Actividad Económica de septiembre fue 0. Estas cifras nos dejan preocupados a todos. Chile no está creciendo como se esperaba y no se cumplirán las proyecciones para 2024. ¿Cómo cambiar el rumbo si las cosas siguen estando igual?

Las condiciones que debemos co-crear como sociedad, cada uno desde su vereda, son múltiples. Mejor educación, en términos de acceso y calidad, diversificación de la economía, más inversión en innovación y capacitación laboral que generen mayores oportunidades, todo lo que requiere visión, valentía y cuestionar lo existente, para que los cambios sean reales y duraderos.

“Comenzar por una reforma al sistema político es clave para el crecimiento económico y social. En la medida que sea eficiente genera confianza y reduce incertezas”.

La co-creación de condiciones que hoy no están presentes, o deben ser modificadas, implica asimismo colaboración, un trabajo en conjunto del Estado, los grupos intermedios, como las empresas, academia, gremios, organizaciones civiles en general y de cada una de las personas que promuevan trabajen y exijan cambios, en muchos de los cuales hay consenso.

La preguntan es por qué aquellos cambios que se requieren, que ya tienen un diagnóstico claro como la reforma al sistema político, no avanzan. Escuchamos del presidente Boric en su última cuenta pública y en su intervención en Enade su intención de promover este cambio. ¿Qué ha pasado desde entonces? ¿Cómo pasamos de intenciones a acciones concretas que nos saquen del statu quo?

Comenzar por una reforma al sistema político es clave para el crecimiento económico y social ya que en la medida que sea eficiente genera confianza, reduce incertezas y agiliza la burocracia en la toma de decisiones. Así garantizar una mejor representación que pavimente caminos para lograr acuerdos ayuda a crear un entorno propicio para el crecimiento económico, asegurando que este sostenible e inclusivo.

Si bien son múltiples las reformas que espera el país para retomar las proyecciones originales de crecimiento e, incluso, mejorarlas, cuestionar y cambiar las normas o estructuras establecidas cuando ya no responden a las necesidades de una sociedad es el punto de partida.

Permisología, reformas al SEIA, al sistema judicial, que moderniza y transparenta el proceso de nombramiento de jueces, mejorando la confianza en el sistema, al sistema de pensiones, una regulación que fomente la creación de empleos acordes a las nuevas realidades, son algunos ejemplos de los múltiples temas pendientes que nos mantienen en condiciones iguales cuando buscamos cambiar los resultados.

Para impulsar el crecimiento y el desarrollo sostenible es necesario romper con las estructuras existentes que han demostrado ser ineficaces e incluso injustas. Cuando las instituciones no se adaptan la confianza solo disminuye y los resultados, como el ultimo Imacec, difícilmente cambiarán, al menos, al ritmo esperado.

Dejar de lado el statu quo parte por una reforma política, que establezca un marco institucional que permita gobernabilidad y espacios de acuerdos que conviertan las ya conocidas intenciones en acciones concretas.